Imagen y Semejanza primero se entendió como un correlato entre la unidad trina de Dios y el proceso psicológico trino del hombre que San Agustín diseñara tan hábilmente. Pero en el Renacimiento imagen se entendió como "poder sobre la creación": el hombre es imágen porque, al igual que Dios, es creador y tiene poder sobre las creaturas.
Esa es la idea que rigió la conferencia magistral de Pier Cesare Bori. Erudito, políglota, luchador por los derechos humanos, tuvo la gracia de aprender español única y exclusivamente para este coloquio. Esta conferencia la dictó en un español lento pero muy pulcro.
En su conferencia expuso cómo funcionó esta idea en diferentes lugares y momentos de la historia: en Pico y su Heptaplus, en la discusión por los derechos humanos de los indios que lidereó Las Casas, en Lutero y su pesimismo antropológico y en los Quáqueros y sus movimientos feministas, y en Locke y las libertades civiles.
La cuestión es la siguiente: el poder otorgado al hombre por ser imagen de Dios ¿debe de ejercerse entre los hombres sometiéndose unos a otros, o sólo ha de someterse a la creación?. Si el poder ha sido otorgado sólo para gobernar la creación, entonces un hombre no puede someter a otro porque todos son creaturas, y por ende dignos.
(ora sí, como diría el lema de Chapingo: por la explotación de la tierra, no la del hombre)Pier Cesare quería demostrar cómo este cambio en la interpretación de imagen y semejanza posibilitó el surgimiento de un concepto tan urgido en nuestros días, como lo es el de dignidad.
Creo que de todo el coloquio, a pesar de que falté a la mitad, fue la más extraordinario. La conferecia de su paisano también fue muy impresionante, pero el señor la pensó en inglés (a pesar de descubrir lo fácil que era para nosotros entender su italiano, y para él comprender nuestro español). Al leernos su cosa esa en inglés, resultaba francamente ridículo cuando trataba de explciar la etimología verdadera y falsa de corde...
Pero no. Pier Cesare, poseedor de una aguda inteligencia, una cultura impresionante, y una sensibilidad propia de quien ha tenido que aprender hebreo, griego y latín, decidió aprender español... total ¿que le duraba otra lengua romance?...
Yo quedé totalmente enamorada.
(Píquele aquí para ver su curriculum)
ANÉCDOTAS:
La pregunta de Sobrino... ahí sí pensé ¡no querrá regresar jamás!
Ambrosio no pudo pronunciar dos términos griegos... pero la cosa se puso peor cuando no pudo pronunciar ni italianos ni ingleses...¡Milagro! El evento empezó con 16 minutos de retraso... todo un récord de puntualidad para Priani.